BROTHERS OF THE SOUL, BROTHERS IN ARMS || SERGEI
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BROTHERS OF THE SOUL, BROTHERS IN ARMS || SERGEI
Baltho escribió:TÍTULO DEL POST
LAMBDA IOTA SERGEI KÓNEV 23:30 PM
A veces se preguntaba si todas sus decisiones cumplieron con la finalidad de lo que había planeado, ¿las cosas habrían sido distintas de haber mantenido a su padre vivo? ¿Qué habría sido diferente de haber actuado antes?. Preguntas que quizás solo fueran una pérdida de tiempo, pero aunque las cosas eran imposibles de saber, aun así no sentía arrepentimiento alguno de lo que había realizado, como había aceptado a su propia oscuridad como una sola… aferrándose a no sentir nada para así entregarle la libertad a sus hermanos, quienes merecían de una manera u otra, la tranquilidad de un futuro… y él actuar como alguien consiente de su familia.
Cerrando el libro que estaba leyendo, se levantó, mirando la cama que en su momento le había pertenecido a Leonardo, mismo que ahora Kobu dormía en ella, junto a Zaria, ambos uno al lado del otro.- ¿Qué les parece si vamos por un poco de agua y aire?.- exclama el ruso a ambos caninos, colocándose de pie y así levantándose, saliendo de su habitación acompañado tanto de su Golden Zaria, y el pastor alemán de nombre Kobu.
Había llegado a Miami, a Lambda buscando un ambiente en donde estar tranquilo, en donde una fraternidad de varones fuera capaces de entregarle el confort que necesitaba. Y lo había conseguido, como también vivido la separación con su gemelo, ambos en un mismo lugar pero parte de dos estructuras diferentes. No podía negarlo, en un rincón de sí mismo, extrañaba a su gemelo, extrañaba tener su espalda cubierta por aquel varón que durante todo su crecimiento se esforzó en cuidar, proteger… incluso ahora, únicamente teniéndole para darle el empuje de seguir adelante. –Este fin de semana, ¿qué dicen de regresar con Anna? Aquí últimamente… no es como antes, ¿verdad?.- pregunta, en lo que le servía un poco de agua tanto a Zaria, como a Kobu, en eso estaba… cuando un ruido alerto a ambos caninos, pero fue Kobu quien agachando sus orejas comenzó a gruñir, aquel pastor Alemán estaba completamente en alerta… el sonido de unas llaves, la cerradura. El ruso frunció su ceño, acercándose a la puerta de entrada, escuchando el forcejeo, ni siquiera lo pensó, sujeto la manilla tirando de la misma.- ¿Qué quieres?.- exclamo bruscamente… para encontrarse con su gemelo.- ¿Sergei?.- inquiere, señalándole a ambos canes que retrocedieran.- ¿Pero que demonios pasa contigo?.- inquiere incapaz de procesar lo que estaba sucediendo… No, no mierda… no otra vez.
Norwood 2.0- Administrador
Re: BROTHERS OF THE SOUL, BROTHERS IN ARMS || SERGEI
BROTHERS OF THE SOUL, BROTHERS IN ARMS
LAMBDA IOTA BALTHO 23:30 PM
Podía seguir escuchando las palabras de sus compañeros en A.A se sentía hipócrita que después de beber, volviera al sitio que le ayudaba a mantener sus fuerzas para no caer de nuevo. Aquella frase que habían mencionado retumbaba en su cabeza;; No todos consiguen salir de esta adicción, ni de otras tantas como hay, que de una u otra manera también se tantean junto al alcohol. Vivimos en una sociedad con un alto grado de convivencia con el alcohol, es algo que parece obligatorio, consumir en una reunión, una cita, comiendo, cualquier situación es propicia para la gente, incluso se sorprenden cuando no consumes, frases como “no quieres nada” con la coletilla de “una sin alcohol”, pues NO, No quiero nada.
Y después de eso las pláticas de los demás diciendo cómo es que lograban salir de ese momento y conseguir un No. La manera en la que el ruso había caído, era de las más estúpidas en la vida, un solo error, uno pequeño que lo había llevado a caer nuevamente. El aliento a alcohol se mantenía en él, pues si, lo admitía que antes de entrar a la reunión había estado bebiendo, a pesar de que se había comido un par de mentas, estaba allí.
Miro la hora, sabia que tenia que regresar a Lambda, no tenía muchas ganas, pero aun así fue hacia allá porque era lo correcto, volver a casa y tratar de dormir un poco sin pensar en el mañana para que no la causara una mayor ansiedad. Sus manos temblaban un poco y batallaba un poco para lograr abrir la puerta, la llave entraba bien, pero había algo que lo impedía, por lo que colocó el hombro en la puerta para tratar de empujar y entrar, pero fue entonces cuando escucho la voz de su hermano.
. - ¿Qué quiero? Entrar a la fraternidad para darme una ducha fría y acostarme a dormir ¿acaso no puedo? . –
Estaba cansado, no físicamente, sino mental que esa era el peor cansancio de todos según él y de verdad que en esos momentos no lo soportaba. Cuando por fin pudo entrar, ver aquella mirada reprobatoria en su gemelo, no le resultaba para nada cómodo, se sentía juzgado severamente.
. - Por favor no vayas a comenzar no ha sido un buen día . –
Le dijo en su idioma natal y miró a los perros que parecían quererle hacer algo, como siempre.
LAMBDA IOTA BALTHO 23:30 PM
Podía seguir escuchando las palabras de sus compañeros en A.A se sentía hipócrita que después de beber, volviera al sitio que le ayudaba a mantener sus fuerzas para no caer de nuevo. Aquella frase que habían mencionado retumbaba en su cabeza;; No todos consiguen salir de esta adicción, ni de otras tantas como hay, que de una u otra manera también se tantean junto al alcohol. Vivimos en una sociedad con un alto grado de convivencia con el alcohol, es algo que parece obligatorio, consumir en una reunión, una cita, comiendo, cualquier situación es propicia para la gente, incluso se sorprenden cuando no consumes, frases como “no quieres nada” con la coletilla de “una sin alcohol”, pues NO, No quiero nada.
Y después de eso las pláticas de los demás diciendo cómo es que lograban salir de ese momento y conseguir un No. La manera en la que el ruso había caído, era de las más estúpidas en la vida, un solo error, uno pequeño que lo había llevado a caer nuevamente. El aliento a alcohol se mantenía en él, pues si, lo admitía que antes de entrar a la reunión había estado bebiendo, a pesar de que se había comido un par de mentas, estaba allí.
Miro la hora, sabia que tenia que regresar a Lambda, no tenía muchas ganas, pero aun así fue hacia allá porque era lo correcto, volver a casa y tratar de dormir un poco sin pensar en el mañana para que no la causara una mayor ansiedad. Sus manos temblaban un poco y batallaba un poco para lograr abrir la puerta, la llave entraba bien, pero había algo que lo impedía, por lo que colocó el hombro en la puerta para tratar de empujar y entrar, pero fue entonces cuando escucho la voz de su hermano.
. - ¿Qué quiero? Entrar a la fraternidad para darme una ducha fría y acostarme a dormir ¿acaso no puedo? . –
Estaba cansado, no físicamente, sino mental que esa era el peor cansancio de todos según él y de verdad que en esos momentos no lo soportaba. Cuando por fin pudo entrar, ver aquella mirada reprobatoria en su gemelo, no le resultaba para nada cómodo, se sentía juzgado severamente.
. - Por favor no vayas a comenzar no ha sido un buen día . –
Le dijo en su idioma natal y miró a los perros que parecían quererle hacer algo, como siempre.
Norwood 2.0- Administrador
Re: BROTHERS OF THE SOUL, BROTHERS IN ARMS || SERGEI
TÍTULO DEL POST
LAMBDA IOTA SERGEI KÓNEV 23:30 PM
Respiro hondamente, entrecerrando sus parpados al escuchar sus palabras. Iba a decir algo, pero únicamente guardo silencio, ¿en qué momento las cosas se habían torcido tanto? Lo veía, pero era incapaz de reconocerle… desde aquel tiempo, desde que había llegado, ese no era su gemelo. O quizás en realidad era su propio reflejo, su propia forma de juzgar el cambio que él mismo había tenido, suspirando, llevo su diestra a acariciar la cabeza de Kobu, empujándole tras sus piernas. – Si entras de esa manera, un día van a pensar que se trata de un ladrón.- respondio en ruso, negando suavemente en lo que se giraba.- Ven conmigo, iba a preparar un poco de té y también cocinar algo, te ves horrible.- termino por mencionar.
No es como que dudara que le iba a seguir, si una cosa tenía clara es que no era una pregunta, tampoco una petición, sino una verdad innegable el que le acompañara a la cocina. Desde que había hablado con Igor, al igual que con Anna, ambos llegaron a la misma conclusión, no podía seguir evadiendo su propia interrogante. Encendió la luz de la cocina, ambos perros ingresaron tumbándose en donde les había enseñado que podían estar, desde allí miraban todo, Zaria miraba expectante, pero Kobu, aquel pastor Alemán que dejaron a su cuidado… miraba con cierto recelo a Sergei, sin apartarse del lado de Zaria.
-¿cómo vas con tus sesiones? – pregunto en lo que colocaba agua a calentar en el hervidor.- Desde que regresamos del viaje, has estado actuando extraño y me has evitado, Sergei, mírame.- fijo sus orbes en el contrario, acercándose al mismo sujeto su rostro inclinándose para así ver las ojeras bajo sus ojos, pero… había otro olor, abrió sus ojos con asombro.- Tírame el aliento, ahora.- ordeno, ni siquiera pensó en la orden que estaba dando, tampoco en cómo estaba frente a él interfiriendo a cualquier vía de escape, solamente… solamente ¿por qué? ¿Por qué su mayor temor… se comenzaba a manifestar?.
LAMBDA IOTA SERGEI KÓNEV 23:30 PM
Respiro hondamente, entrecerrando sus parpados al escuchar sus palabras. Iba a decir algo, pero únicamente guardo silencio, ¿en qué momento las cosas se habían torcido tanto? Lo veía, pero era incapaz de reconocerle… desde aquel tiempo, desde que había llegado, ese no era su gemelo. O quizás en realidad era su propio reflejo, su propia forma de juzgar el cambio que él mismo había tenido, suspirando, llevo su diestra a acariciar la cabeza de Kobu, empujándole tras sus piernas. – Si entras de esa manera, un día van a pensar que se trata de un ladrón.- respondio en ruso, negando suavemente en lo que se giraba.- Ven conmigo, iba a preparar un poco de té y también cocinar algo, te ves horrible.- termino por mencionar.
No es como que dudara que le iba a seguir, si una cosa tenía clara es que no era una pregunta, tampoco una petición, sino una verdad innegable el que le acompañara a la cocina. Desde que había hablado con Igor, al igual que con Anna, ambos llegaron a la misma conclusión, no podía seguir evadiendo su propia interrogante. Encendió la luz de la cocina, ambos perros ingresaron tumbándose en donde les había enseñado que podían estar, desde allí miraban todo, Zaria miraba expectante, pero Kobu, aquel pastor Alemán que dejaron a su cuidado… miraba con cierto recelo a Sergei, sin apartarse del lado de Zaria.
-¿cómo vas con tus sesiones? – pregunto en lo que colocaba agua a calentar en el hervidor.- Desde que regresamos del viaje, has estado actuando extraño y me has evitado, Sergei, mírame.- fijo sus orbes en el contrario, acercándose al mismo sujeto su rostro inclinándose para así ver las ojeras bajo sus ojos, pero… había otro olor, abrió sus ojos con asombro.- Tírame el aliento, ahora.- ordeno, ni siquiera pensó en la orden que estaba dando, tampoco en cómo estaba frente a él interfiriendo a cualquier vía de escape, solamente… solamente ¿por qué? ¿Por qué su mayor temor… se comenzaba a manifestar?.
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